04 – 12 – 23
Eso de que el nuevo gobierno no va a durar es relativo,
diría el Negro Ábalo si viviera. Depende de la resistencia, chocolate por la
noticia. Si se le enfrentan, si se desarrolla un plan de lucha sólido, si las
protestas son masivas y activas, si la represión se torna furibunda, durará
poco. Si la resistencia es fragmentaria y limitada a troskos, piqueteros y un
par más habrá que esperar cuatro años y si acaso y de chiripa ganar con un
frente democrático las próximas elecciones. De los palos, Tiempo Argentino
y Página han reportado incidentes alarmantes contra diversidades
sexuales que no creo que se generalicen porque esa conducta no resultaría
conveniente a la imagen del gobierno entrante; colaboraría a que dure menos. Si
el pelucón se torna más fascista que neoliberal el escenario violento parece
más cercano. No estoy seguro si sería del todo inédito en la región (¿Perú?); tal
vez sí sería novedosa la violencia para los 40 años desde el retorno a la
democracia.
Compañeras acercan presentes para sus pares de Mendoza,
provincia de mi alma que visitaremos en un par de días. Les ofrecimos piezas de
asado al horno que nos sobraron del sábado 2 de diciembre que conservábamos
debidamente refrigeradas. No quedó nada. Se fueron a la una y media de la
mañana.